Destacado violinista abordó los desafíos de la música de cámara

 Destacado violinista abordó los desafíos de la música de cámara

John McGrosso, integrante de Arianna String Quartet, compartió sus conocimientos con niños y jóvenes que participan en la primera versión online del Campamento Musical Marqués de Mancera.

Tocar al mismo tiempo, no es lo mismo que tocar todos juntos. El violinista John McGrosso dice que es fundamental entender esa diferencia, porque es una de las bases para lograr una mejor integración de cada músico en una orquesta. Y más aún, cuando se trata de un elenco de cámara.

McGrosso es miembro de Arianna String Quartet de Estados Unidos,  junto a Julia Sakharova (violín), Joanna Mendoza (viola) y Kurt Baldwin (violoncello). Y es uno de los invitados internacionales al 26° Campamento Musical Marqués de Mancera.

El evento se realiza por primera vez en formato online, lo que ha permitido integrar a las clases vía Zoom a diversos expositores. En el bloque de ayer por la mañana, McGrosso se reunió con profesores y alumnos de distintos instrumentos para revelar algunas claves de la música de cámara desde su propia experiencia.

 “Como músicos, ser parte de una gran orquesta es una de las primeras experiencias de nuestras vidas. Pasamos por eso primero, para luego avanzar hacia otros formatos que implican una formación más reducida de integrantes. Cuando tocamos en una orquesta nos hacemos responsables de tocar de la mejor manera posible la parte que nos corresponde y es el director quien se encarga de poner cada pieza en su lugar”, dice.

Y agrega: “Sin embargo, como músicos de cámara debemos desarrollar un entendimiento mucho mayor de lo que estamos tocando. Por eso es que la música de cámara se toca todos juntos, que no es lo mismo que tocar todos al mismo tiempo. La diferencia tiene que ver con cómo la música nos une más allá de la mera interpretación, lográndose que los músicos se vuelvan un solo elemento”.

Analogías

Arianna String Quartet se formó en 1992 y dos años más tarde ganó el Fischoff National Chamber Music Competition, que es el más antiguo de Estados Unidos. Desde 2000 el grupo es residente de la Universidad Missouri, donde McGrosso es profesor.

En paralelo a las clases, el cuarteto ha grabado dos discos  para Centaur Records: “Janacek String Quartets” y “Beethoven middle string quartets”. Un fragmento de las obras de este último registro estuvo en pantalla en la charla del Campamento. Fue utilizado para demostrar cómo en Arianna String Quartet se las ingenian para hacer más efectivo el aporte de cada cual.

“Una de las cosas que debemos entender es que el compositor y el intérprete tienen distintas perspectivas sobre una misma obra. El compositor se nutre por lo general de sus experiencias de vida. Eso es lo que busca expresa en sus creaciones. Son cosas muy intensas y es mucha información puesta en una sola composición, están las armonías, las texturas y la interacción de los instrumentos. Entonces cuando tocamos juntos, se debe buscar la manera de reunir en un punto común cuatro visiones diferentes”.

Para resolver eso, dice McGrosso, es clave entender que en el cuarteto no hay individualidades. “Somos parte de un todo y cada parte es necesaria El compositor también lo entiende así, entonces debemos dejar de pensar en el individuo y más en el grupo”.

Junto con decodificar cada pieza desde el punto de vista técnico, el violinista implementó su propia metodología para encararla desde la sensibilidad y el aporte que puede hacer desde su instrumento. “Una buena analogía es la de un paisaje costero: hay muchos elementos distintos. Está el agua, las olas, la vegetación que se mueve con el viento. Todas esas cosas significan algo por si solas, pero también son parte de una imagen mucho más grande y enriquecedora en su conjunto. En la música de cámara ocurre algo similar:todos los elementos deben estar en relación y armonía para configurar una idea completa”.

Campamento Musical Marqués de Mancera 2021 Versión Online

¿Cómo suena?

A diferencia de la experiencia sinfónica, donde el conductor ciertamente ayuda a entender la obra, en la música de cámara se apela a un mayor grado de independencia por parte de los músicos.

“Parece obvio, pero para entender la obra debemos atender a la partitura general y no solamente a lo que se nos asigna en cada instrumento. El compositor siempre será mucho más inteligente que los músicos, que a veces creen que pueden resolverlo todo solamente desde una perspectiva”, dice.

Y agrega: “Muchas veces al abrir una partitura nos enfrentamos a algo inentendible, como si fuera un cuadro de arte contemporáneo. Para avanzar desde ahí entonces son válidas varias preguntas, como por ejemplo, cuál es el carácter de la pieza, cuál es el ambiente y cuál es la historia que queremos transmitirle a la audiencia. Para mí, una buena solución es pensar como si la música fuera una película y preguntarme de qué se trata esta película, dónde transcurre, en qué escenarios y así voy tratando de simplificar los conceptos”.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *